Los poetas Fernando Sabido Sánchez, Mariano Rivera Cross, Carlos Guerrero, Domingo Faílde y Dolors Alberola en Jerez de La Frontera (Cádiz), Primavera 2013

miércoles, 8 de julio de 2015

ANA GARCÍA LABRAC [2.106]



Ana García Labrac 

Nació en 1989 en Granada. Residió allí hasta los dieciocho años, cuando se trasladó a Córdoba para comenzar sus estudios de Veterinaria, que finaliza
este curso 2013/14 en la Universidad de esta ciudad, tras haber cursado un año en Madrid. Combina la escritura de poesía y relato. Ha sido finalista de Ucopoética 2014.  web: http://unagatasingato.blogspot.com.es/







Le dice "princesa" y nada tiene que ver
con esas analogías románticas que hacen
los preadolescentes de poco ingenio.
La llama "princesa" porque las historias de mujeres
que claudican y se montan en caballos blancos
para huir de todo (a pesar de lo cursi), siempre le han gustado.
Ese extraño encanto fugitivo que los unió desde el beso "uno".

Ella, por su parte, le dice "mi amor" cada cinco minutos.
Le dice "mi amor" cuando quiere que la mire
y también mientras caminan por calle.
Si no hay nada de qué hablar entonces,
con un dedo en la palma de su mano,
le escribe un secreto en clave morse: "mi amor".
"Mi amor" es lo que dicen sus ojos cuando le mira la boca,
"mi amor" antes de las buenas noches,
"mi amor" con la manos en su espalda.
"Mi amor" para cualquier cosa y lo dice tan bonito,
que a él le da pena contradecirla.
Y es muy raro, porque hay días
en los que no se lo cree y a la vez sí.
Cree que le quiere decir "mi amor" pero no cree que lo sea.
"Mi amor", le susurra al oído y él la abraza,
quizás es pan para hoy y hambre para mañana,
pero nadie con ganas se niega a comer
lo que tiene entre las manos.
Llamarse mutuamente era
como poner en evidencia,
las únicas dos cosas
que hacen los amores imposibles:
quererse y tenerse miedo.




Animal herido

No sé qué éramos:
animales heridos.
Los amantes, si repiten mucho,
dejan de ser amantes
para convertirse en algo que aún no tiene nombre.
A veces las historias no hace falta acabarlas,
a veces se terminan solas.
Como los poemas.





ASESINATOS

"A la poesía romántica me la mató Bukowski.
A la locura, Panero.
A la soledad, Alejandra.
A mi canción preferida, el despertador.
A mi inocencia una ciudad
y un desfile de cuerpos sin alma.
A la esperanza la maté yo
para no perderla."

Poema de Ana García Labrac publicado en "Todo Principio" libro de los poetas ganadores en Ucopoética 2014.




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